agosto 18, 2009

DIEZ MANOS Y CINCUENTA DEDOS NO ALCANZAN


Necesitan otra que los sostenga para seguir destruyendo.

¡Bloqueo democrático a Colombia!

Como el macaco bolivariano, solo produce petróleo y gasta todo en armas para sembrar bases revolucionarias en Sudamérica, pidió ayuda a la mona argentina, para asfixiar con el democrático bloqueo a Colombia, solidaridad y unidad latinoamericana le llaman.

Estamos hablando que la interrupción abrupta del intercambio entre los dos países representa para Venezuela la pérdida de 30.000 empleos y en el caso de Colombia la cifra supera los 500.000 empleos, según cifras de Fedecamaras Táchira. Además implica la afectación de mas de 2000 empresas pequeñas y medianas que prestan servicios al comercio binacional y de manera indirecta se afecta también el turismo que genera cientos de miles de empleos adicionales. Para el pueblo venezolano además de la pérdida de empleo, significa mayor inflación, ya que traer productos a miles de kilómetros de distancia de Argentina a Venezuela, significará duplicar la inflación que ya ha destruido en demasía el poder adquisitivo del trabajador en nuestro país.

Si hicieron más que eso en Argentina ¿Por qué se iba a privar de la foto y los titulares?
Allá fueron rápidos en un avión pagado por los pobres argentinos los ricos industriales y productores amigos del poder a hacer negocios; pollos, huevos, carne, leche y maquinarias para reemplazarle a Chávez lo que compra a Colombia.

Les sobran manos y dedos para apropiarse de lo ajeno pero siempre necesitan otra mano para que los sostenga.

Venezuela le vendía a Colombia antes del 2005, 2100 millones de dólares anuales en productos y Colombia le vendían a Venezuela 1750 millones de dólares. Hoy esa relación se ha invertido. Venezuela le compra a Colombia hasta el 2008 unos 7.000 millones de dólares y Venezuela ha descendido la venta a 1100 millones de dólares. Y este año el promedio de ventas a Colombia por parte de Venezuela apunta a una caída de 500 millones de dólares.
c¿Está claro? Tres pájaros de un tiro, un democrático bloqueo a Colombia, resolver su caída de producción y la mano que los sostenga. “Una mano lava la otra y las dos lavan la cara”.

Sin duda está más allá del entendimiento de los colaboracionistas locales que por temor a un estallido preparan una carnicería.
Tiempo al tiempo en los días que vienen quedará bien a la vista de los que se niegan a ver, porqué pasó todo lo que pasó en nuestra patria; quienes son los que abonaron la tierra y allanaron el camino en nombre de la paz, la democracia y la gobernabilidad, para que ideólogos extranjeros sembraran una guerra impía.

Para decirlo suave como el camino del infierno esta empedrado por las buenas intenciones de los idiotas.

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